Productoras gráficas: Adaptarse para impulsar el negocio gráfico

27/11/2017

Hasta hace algunos años, las imprentas eran simples proveedoras de un servicio específico: la impresión. Sin embargo, con el correr del tiempo y la evolución de todos los actores de la cadena del área gráfica, incluyendo a los clientes, las empresas del sector tomaron un rol más amplio, siendo capaces de generar por sí mismas un servicio integral.

El retail es uno de los segmentos que ha ido cambiando en términos de requerimientos de impresión.

Una campaña publicitaria de antaño requería de grandes catálogos que se distribuían en las tiendas o junto a los periódicos. Ahora, estos folletos son una de muchas herramientas que se utilizan y que incluyen gráficas en los locales, muebles específicos para de cartón o madera, revestimiento de vehículos, entre otros. Y, frente a todas esas necesidades, las productoras gráficas surgieron como evolución natural de algunas imprentas tradicionales.

Croma es una de ellas. “Antes, las imprentas sólo daban el servicio de impresión”, explica Ignacio Ruiz-Tagle, socio gerente de la empresa. “En nuestro caso hemos tenido que implementar áreas de negocios que van directamente relacionados con la gráfica, tales como la fabricación de muebles en todo tipo de materiales, especialización en iluminación de vitrinas bajo normas de tecnología Led, accesorios POP fabricados en acrílico, madera y fierro, además de la incorporación de flotas de vehículos para gestionar nosotros mismos el servicio de despacho a los puntos de venta”.

Incluso, los diseñadores gráficos han pasado a formar parte integral de la industria, respondiendo a la necesidad de tener conocimientos para múltiples formatos y capacidad de efectuar cambios o hacer propuestas de mejoras de acuerdo a cada requerimiento, agregando valor a un servicio que busca abarcar todas las áreas gráficas. En un evento, por ejemplo, pueden entregar desde el menú hasta las gigantografías del escenario, pasando por las encuestas de satisfacción, las carpetas y los pendones.

“Los clientes tienden a preferir entenderse con un solo proveedor para el desarrollo completo de la campaña, de esta manera no hay riesgos de tener, por ejemplo, múltiples tonalidades de color por haber tenido varios participantes en la misma campaña. Otra ventaja es que se centraliza toda la logística y se disminuyen los costos”, agrega Ruiz-Tagle.