Empaques: La clave para el éxito de la fruta chilena

31/10/2017

Chile es el mayor exportador de fruta fresca del hemisferio sur. Durante la temporada pasada, casi 2,6 millones de toneladas de productos se enviaron a todo el mundo, generando ingresos para el país de US$4.000 millones. Pero hay un factor que es de suma relevancia en el éxito de estos envíos: los empaques.

Y es que las largas distancias que tiene que recorrer la fruta producida en las más de 294 mil hectáreas productivas del país, ubicadas entre las regiones de Atacama y Los Lagos, generan el desafío de llegar a destino con la misma calidad que uva de mesa, manzanas, arándanos, duraznos, cerezas y otras variedades tienen al momento de ser cosechadas.

4,3% aumentó la exportación de fruta chilena en 2015-2016.

“En todas las frutas frescas el empaque del producto es muy importante, tanto por la tecnología que se requiere para poder llegar con la fruta en las condiciones deseadas tras los largos trayectos, como también para lograr cautivar al consumidor”, explica el subgerente de Marketing de la Asociación de Exportadores de Frutas de Chile (Asoex), Ignacio Caballero.

A nivel de arándanos, por ejemplo, Chile es el principal exportador del mundo. “Hoy esta categoría de líder está en juego, principalmente por los problemas que presenta poder llegar a destinos lejanos, como Asia, con la calidad de los mercados demandan. En este sentido, el packaging juega un factor fundamental, ya que puede ayudar a mantener la calidad y extender la vida útil de las frutas chilenas”, comenta Rodrigo González, gerente general de Co-Inventa, plataforma de innovación enfocada en el desarrollo de envases y embalajes para alimentos.

Cerezas, la estrella

El 82% del volumen exportable de cerezas chilenas parte a China. Allá, los consumidores las utilizan como regalo especialmente con motivo del año nuevo chino, cuando se produce el peak de precios, por lo que los productores locales buscan llegar de forma precisa a destino, con envíos que en general comienzan en noviembre.

US$10 dólares mínimo cuesta un kilo de cerezas en China.

El país está realizando una campaña público-privada para posicionar a las cerezas chilenas en China, junto a lo que se realizaron estudios para entender al consumidor chino. Así se determinó que las principales razones para consumir cerezas son su frescura, calidad, atributos saludables y su atractivo visual, siendo el color rojo un importante driver de compra. A un 39% le gusta comprar esta fruta a granel, mientras que el 32% las prefiere en bolsas plásticas.

“El rol de los empaques es importantísimo en las exportaciones de cerezas a China. Pensemos que las cerezas viajan entre 30 a 35 días para llegar al mercado chino y asiático en general”, indica Luis Schmidt, presidente de Fedefruta y ex embajador de Chile en ese país. “De a poco, hemos estado utilizando fletes más rápidos, con envases con atmósfera modificada en containers y potes autosellables, lo que permite que la fruta se mantenga fresca por más de 30 días y en unas condiciones óptimas, como si estuviera recién cosechada. Por esto, el empaque cumple un papel fundamental”.

En un principio, dice Schmidt, quien tiene un campo productor de cerezas en la Región del Maule, se enviaban cerezas en envases de 5 kilos, pero la demanda de los consumidores por menores volúmenes llevó a modificar los embalajes y ahora se envían envases de 2,5 kilos y potes de 500 y 250 gramos, de manera en que el producto llegue directamente al consumidor final.

18,9 millones de cajas de cerezas se exportaron en la temporada 2015-2016.

Ignacio Caballero, de Asoex, dice que para la experiencia de consumo resulta vital la tecnología del empaque que se utiliza, siendo lo ideal evitar reempaques en el mercado de destino, ya que, apenas se abre el empaque original, empieza a madurar el producto. “La condición, el color rojo fuerte y en especial el color verde completo del pedúnculo son los aspectos claves y que dan muestras de una buena calidad y frescura de nuestro producto”, agrega.

El desafío para la industria de los embalajes es lograr entregar a los productores de fruta envases que permitan superar las barreras y cumplir las exigencias de los consumidores, en lo que la innovación es clave. “Hoy la industria del packaging está respondiendo a las necesidades de los productores, buscando nuevos materiales de envasado que permitan extender la vida útil de los productos y mantener una estética que solicita el consumidor final”, concluye Rodrigo González, de Co-Inventa.