“Cambiarme a lo digital y especializarme en una máquina de etiquetado autoadhesivo fue la mejor decisión que tomé”

10/03/2020

Jorge Díaz (38) es operador de máquinas en la empresa AMF Etiquetas. Cuenta que llegó a AMF Etiquetas hace 22 años cuando la empresa se llamaba Multigráfica. Cursaba tercero medio en la Escuela de la Industria Gráfica (ex Escuela de Artes Gráficas) y ese año tenía que comenzar su educación dual, un programa de formación práctica que realizan los alumnos en empresas gráficas.  “Llegué por el azar. Junto a otro compañero postulamos a otra empresa y a última hora en ese lugar no nos recibieron. Entonces el profesor encargado nos ubicó aquí. Tal vez si me hubiesen recibido en la otra imprenta no llevaría tantos años aquí”, comenta Díaz, cuyo trabajo actual es operar la prensa digital de etiquetas HP Indigo WS6800, la más moderna de la empresa.

Su primer trabajo en la empresa fue como ayudante volante, cargo que consiste en rotar por todas las prensas supervisando los requerimientos, por ejemplo cargar papel o poner tinta. Luego pasó a ser ayudante de un maestro en una máquina en particular y con el tiempo comenzó a reemplazar a ese maestro. “Cuando quisieron hacer un tercer turno me consideraron a mi”, comenta.

Hace 16 años, Jorge Díaz fue el primer trabajador de AMF Etiquetas en certificarse en el uso de la prensa HP Índigo para impresión de etiquetas autoadhesivas.

 

La llegada del autoadhesivo

La decisión de la empresa de hacer un cambio tecnológico hacia lo digital e innovar con el etiquetado autoadhesivo fue un desafío importante para su carrera. “Como yo era el más joven de los operadores me dijeron que tenía más cabeza para aprender algo nuevo”, comenta Jorge, quien hace 16 años se transformó en el primer trabajador de la empresa en certificarse en el uso de ese tipo de máquinas.

Pero el aprendizaje fue difícil: “No me funcionaban bien las cosas, los técnicos no me daban soluciones, porque estaban aprendiendo también. Entonces yo estaba estresado, quería volver a mi máquina de antes”. Cuenta que, ante sus frustraciones, habló con el dueño de la empresa quien le aconsejó tener una visión futurista, porque los otros tipos de máquina iban a quedar atrás. “Cambiarme a lo digital y especializarme en una máquina de etiquetado autoadhesivo fue la mejor decisión que tomé”, reconoce. Con el pasar de los años ha enseñado a muchos trabajadores cómo usar la máquina.

“Me gusta la imprenta porque no es un trabajo en el que todos los días haces lo mismo. Trabajas con diseñadores, los puedes ayudar y guiar. Me gusta dar soluciones”, explica Díaz, quien agradece a su recientemente fallecido padre por todos los logros de su carrera laboral. En 2019 aceptó un nuevo desafío: ser el secretario del sindicato de la empresa.