Ajustes en proyecto de ley REP: Diarios periódicos y revistas son retirados de la lista de productos prioritarios

13/06/2016

El escrito original imponía a editoriales como el Mercurio o Televisa hacerse responsables de la disposición final, y los costos asociados, de los ejemplares que imprimían y que ponían a la venta.

El ministerio de Medio Ambiente viene patrocinando, desde 2013, el proyecto de ley que establece un marco para la “Gestión de residuos, la Responsabilidad Extendida del Productor y Fomento al Reciclaje”, el cual fue presentado durante el gobierno anterior y que ya se encuentra en su segundo trámite constitucional en el Senado.

Este proyecto crea instrumentos de gestión ambiental, entre los que considera la implementación de la Responsabilidad Extendida del Productor (REP), que establece que fabricantes e importadores de nueve productos definidos como prioritarios fuesen responsables de la organización y financiamiento de la gestión de los residuos de los mismos que se comercialicen en el país.

Diarios, periódicos y revistas fueron incluidos como uno de los nueve productos prioritarios, junto con aceites lubricantes, aparatos eléctricos y electrónicos, envases y embalajes, medicamentos, neumáticos, pilas y baterías, plaguicidas, y vehículos.

Esto significaba que, por ejemplo, el diario El Mercurio o editorial Televisa debían hacerse responsables de la disposición final –y los costos asociados– de los ejemplares que imprimían y que ponían a la venta.

De inmediato, la Asociación Nacional de la Prensa consideró que el proyecto significaba una amenaza para la libertad de prensa.

En concreto, la ANP identificó tres peligros del proyecto de ley original, referidos a la autorización previa a publicar, metas de recolección o valorización y sanciones ante su incumplimiento y obligaciones de comercializadores y distribuidores. Estos peligros fueron detallados en una columna redactada por el secretario general de la Asociación, Francisco Moreno, y que fue publicada en la revista gremial:

“La primera es la referida a la autorización previa por parte del Ministerio del Medio Ambiente con la cual deberán contar todas las sociedades editoras y periodísticas de Chile que publican diarios, periódicos y revistas, lo cual constituye una verdadera “censura previa” inédita en nuestra historia legislativa que desde 1812 asegura la libertad de prensa. Para vender un diario, periódico o revista se requerirá de una autorización previa por parte del Ministerio del Medio Ambiente (…).”

“La segunda es aquella que dice relación con la sanción de prohibición de venta de diarios, periódicos y revistas mientras no se haya dado cumplimiento a las metas de recolección o valorización de papel de diario o revistas establecidas en los decretos supremos que para estos efectos dicte el Ministerio del Medio Ambiente. (…)”

“La tercera, es la relativa a las obligaciones a comercializadores y distribuidores que atentan contra el derecho de propiedad y al de desarrollar cualquier actividad económica. El proyecto establece que tanto los comercializadores como los distribuidores de diarios, periódicos y revistas tienen la obligación de aceptar sin costo alguno la entrega de los residuos de productos prioritarios de parte de los consumidores, siempre que sus instalaciones tengan una superficie suficiente (…)”.

A estos peligros, se sumaba el desconocimiento a la enorme labor de la industria de reciclaje de diarios, periódicos y revistas en Chile, en la cual participan 82 empresas orientadas al acopio y recuperación de papel y cartón, y que en el sector industrial representa un 70% de recolección.

Por otro lado, la Sociedad Interamericana de la Prensa aprobó con observaciones el informe de la situación de la libertad de prensa en Chile.

Finalmente, el pasado 13 de octubre, se modificó el proyecto de ley: “Lo más relevante fue la voluntad de diálogo que demostró el ministro del Medio Ambiente junto con los senadores miembros de la Comisión de Medio Ambiente del Senado, quienes entendieron nuestra postura y las amenazas que constituía el proyecto para la libertad de prensa en Chile. De este modo, salimos del artículo noveno que considera el listado de productos prioritarios”, comentó Francisco Moreno. De esta manera, los diarios, periódicos y revistas no están sujetos a metas, obligaciones ni sanciones. “Nuestra única obligación es informar al Ministerio de Medio Ambiente, en caso que las sociedades editoriales y periodísticas estén haciendo recolección y valorización, y siempre y cuando sea el Ministerio quien requieran la información”, tal como quedó especificado en el artículo décimo del proyecto.