Desde el Taller: Pedro Alfaro – Prensista en imprenta y editorial Valente

Pedro Alfaro se graduó en 1999, después de haber estudiado III y IV medio en la Escuela de Artes Gráficas de San Miguel. De inmediato comenzó a hacer su práctica en Valente, donde lo contrataron y sigue trabajando hasta hoy. En un comienzo “habían unas máquinas muy pequeñas Ricoh, de sobremesa, como de oficina y me pusieron en esa máquina. Era bien sencilla y sólo había que tirar páginas. De a poco me dejaron como prensista”, explica Alfaro. Hoy trabaja con una máquina Heidelberg de 5 colores.

Cuenta que en estos casi 20 años de trabajo ha ido aprendiendo cosas nuevas, y también enseñando: “yo me meto mucho en lo que es mecánico, en lo que es fierro, saco panas”, cuenta. De la misma forma, explica que le gusta enseñar a los nuevos ayudantes que van llegando a la imprenta lo que él ha aprendido en estos años, aunque “los chiquillos quieren aprender todo muy rápido”, puntualiza.

En este sentido, recomienda a ayudantes y prensistas que cuando no sepan algo, no duden en pedir ayuda o consejos a alguien con más experiencia: “Hay muchas cosas que no te lo dice un catálogo, problemas y mañas de las máquinas que con la experiencia se va aprendiendo: qué cantidad de polvo necesita un trabajo, a qué velocidad, cantidad de tinta, de alcohol. Hay varias variantes para que un trabajo salga bien o mal”, indica Pedro.

Sobre su labor, lo que más disfruta es imprimir libros con fotografías: “ahí la máquina muestra todo lo que puede hacer, todo su potencial” dice. Y a su parecer los trabajos más difíciles son los que implican imprimir fondos entramados, grises y azules: “estos muestran las fallas de las máquinas… y la experiencia te dice qué hacer para mejorarlo, regular el agua, preparar mejor la tinta, echarle aditivo”.

Pedro vive con su pareja Elsa, y con sus tres hijos Mauricio, Sebastián e Isidora.